Múnich, la capital de Baviera, es la tercera ciudad más importante de Alemania y conocida por todos por el Oktoberfest.
La ciudad no es demasiado grande de modo que se puede ver perfectamente en 2 ó 3 días. De hecho, en los puentes se llenaba de cientos de españoles, es una escapada perfecta.
Hoy escribimos una pequeña guía del centro histórico, y las próximas semanas os contaré más de todo lo que hay que ver fuera del casco.
Si vais varios días, os recomendamos que el primer día empecéis lógicamente por el casco histórico.
Comenzar la visita por el corazón de la ciudad, la Marienplatz. En medio esta y da el nombre a la plaza, por la Columna de María, la patrona de Baviera. Es el punto de encuentro para las quedadas de españoles.
El edificio más importante de la plaza es el Nuevo Ayuntamiento o Neues Rathaus.
En su torre podemos ver su famoso carillón, que cuenta con 43 campanas y 32 figuras de cobre, que a las 11 y a las 12 del medio día suenan. Entre mayo y octubre, también lo podréis ver a las 17:00.
A un lado de la plaza veréis también el Antiguo Ayuntamiento o Altes Rathaus, más sencillo y de estilo medieval. Su torre ahora es el Museo del Juguete.
La siguiente parada es el Peterskirche, la iglesia más antigua de la ciudad, situada frente al Nuevo Ayuntamiento. Desde arriba se obtienen las mejores vistas de la ciudad. El precio de subir a la torre son 2 euros.
Al lado de la iglesia, se encuentra el Virtuahenmarkt.
Aquí hay que hacer una parada en el Biergarten.
Continuamos por la calle Westenrieder, hasta la iglesia del Espíritu Santo (Heiliggeistkirche), de estilo gótico y barroco.
Llegamos a la puerta Isartor, la tercera y más antigua. En el interior de una de las torres hay actualmente un museo dedicado al actor muniqués Karl Valentin.
Volvemos dirección al Viktualienmarkt, y subimos por la calle Rindermarkt, para subir hasta el Museo de la ciudad, en la St.-Jacob-Platz. El museo alberga todo tipo de objetos históricos de la ciudad y la colección también del Teatro de Marionetas.
En esta misma plaza se encuentra el Museo Judío, que alberga la Sinagoga, el Museo y el Centro de la Comunidad.
Si proseguimos por la calle Oberanger encontramos la puerta Sendlinger Tor, del siglo XIV.
Escondida en la calle de Sendlinger podemos ver la preciosa Iglesia de los Hermanos Asam. En el interior de la iglesia, es alucinante.. Sentaros un rato para ver toda su decoración.
Volviendo de nuevo al centro subimos por la comercial calle Neuhauser.
La calle desemboca en la Karlsplatz. A la que accedemos atravesando la Karlstor.
Continuamos hasta la Frauenkirche, la catedral de Nuestra Señora de Múnich, otro de los edificios más importantes junto al Nuevo Ayuntamiento.
Hay una leyenda que dice que la huella de pie que se observa cerca de la puerta de acceso interior, pertenece al diablo. Este se mofó al entrar en la iglesia porque no tenía ventanas, y es que si nos colocamos en el lugar donde está la huella mirando hacia el altar, las columnas no dejan ver las cristaleras laterales.
Si tenéis hambre un lugar típico para tomar algo es la cervecería Hofbrauhaus. Una banda ambienta el local y los camareros visten la ropa típica.
Por aquí pasaron personajes como Lenin y Hitler.
Salimos a la calle Maximilian para situarnos en la Max-Joseph-Platz, lugar donde se encuentra el Teatro Nacional, sede de la opera nacional. El edificio es de estilo neoclásico, inspirado en la Grecia antigua.
Por último, la Residenz, el palacio más grande de Alemania. Donde destaca el Antiquarium, la Ahnengalerie, y el Grottenhof (Patio de las Grutas).
Una recomendación es que hagáis un free tour por el centro. En mi primer sábado viviendo allí, lo hice y me sirvió para poder enterarme de toda la historia bien de la ciudad. Os dejo el enlace al Free Tour de Múnich.
Hasta aquí la zona del centro y os dejamos a continuación otras dos entradas guías de Múnich:
Múnich: Palacio Nymphenburg, Haidhausen y Prinzregenstrasse
Munich, zona norte: Odeonsplatz, Jardín Inglés, Königsplatz, Olympiapark
¡Nos vemos en la siguiente parada!